De farmacia a cafetería, ¿conoces la historia de la farmacia de Flores?

El café tiene la capacidad de reunir a las personas y propiciar la puesta en común de anécdotas, aunque, en otras ocasiones es capaz de convertirse en el protagonista principal de las historias. Tal fue el caso de una humilde farmacia porteña llamada Farmacia Santa Elena.

Esta farmacia se trataba de un establecimiento de barrio, al igual que otras farmacias a buen precio, que se encontraba ubicada en la intersección de Directorio y Rivera Indarte, en la esquina de Flores; sin embargo, todo cambió para sus clientes de toda la vida cuando sus puertas cerraron y se volvieron a abrir como las de un café. Esta es la historia de La Farmacia Restobar, un café con encanto ubicado en Av. Directorio 2398.

La farmacia fue regentada por Don Mauricio Giwnewer hasta el año 2000, cuando su yerno Fernando Vidal pasó a ocuparla. Como homenaje a su suegro, que había sido muy querido por toda la comunidad, Vidal decidió preservar todo el mobiliario de la farmacia y convertir el establecimiento en un café y restó.

Desde entonces, grandes personalidades como el escritor César Aira, el cantor de tangos Ariel Ardit, el historiador Osvaldo Bayer o la periodista Canela no dudaron en hacer de ese espacio un encuentro de ideas entre personas que pretenden escapar de la celeridad del día a día.

Caracterizada por su ambiente tranquilo, que invita a degustar un buen café, La Farmacia Restobar adentra a sus visitantes en una época ya pasada en la que todo era más sencillo.

Dentro de su carta destacan la picada tradicional, los panqueques salados y la fondue, tanto la de queso como la de chocolate, aunque el mayor reclamo es el Café La Farmacia, un delicioso café crema con notas de chocolate y canela que se caracteriza por su intenso sabor y textura contundente.

Si algún día das un paseo por las calles de Buenos Aires, no te puedes perder este maravilloso espacio, en el que tendrás la oportunidad de disfrutar de charlas distendidas con otros amantes del café, el placer de la lectura y la escritura y el ambiente sanador de los tiempos pasados.